Madagascar

Un cóctel perfecto para un viaje diferente. Los lémures, camaleones, baobabs y orquídeas son representativos de esta tierra con infinidad de variedades endémicas. A todo esto le añadimos la atracción de sus habitantes, una mezcla de razas que les confiere un peculiar carácter forjado lo largo de los años al compartir territorio con gente llegada de otras tierras.

Unida hace miles de años al continente, Madagascar se convirtió al separarse del continente, en la isla más grande de África y ese aislamiento le dió su tesoro más preciado, una fauna y flora únicas en todo el mundo que sobresale por su diversidad.

Nos asombrará la variedad de ecosistemas, desde el Parque Nacional de Ranomafanaa, la playa tropical o la frescura de las tierras altas de Antsirabé, hasta el paisaje desértico pasando por la sabana o el bosque de pináculos erosionados de la Reserva Natural de Tsingy de Bemaraha, y playas sombreadas por altos cocoteros, barreras de coral y selva tropical a pie de arena...