Hace unos días un amigo, Fernando Tenorio Sánchez, de las primeras andanzas marroquíes me envió unas fotografías de un viaje que hicimos en 1985 al Atlas.
En aquella ocasión mi venerable Dyane 6 rampaba sin rechistar por las pistas atlantes.Buscábamos el "tres mil" más oriental de la cadena, el Djebel BouNoceur. Aquel año no pudimos subir pero alucinamos con la experiencia. Unos profesores de Rabat, "exiliados" en Oulad Alí nos dieron cobijo en la escuela, dormíamos en una cama instalada en la propia clase e incluso cocinábamos en la misma, mientras que éramos la distracción permanente de la chiquillería. Dos veces más he vuelto por aquella aldea perdida, la última, el pasado mes de Febrero. Los tiempos han cambiado algo, ahora hay luz eléctrica y la pista ha sido asfaltada. Siempre me llamaron la atención los niños de Oulad Alí, bereberes de ojos claros, muchos de ellos castaños y rubios... Sin duda estas montañas del Atlas Oriental fueron junto con el Rif las primeras en recibir las oleadas de refugiados andalusíes a partir del año 1500, puede que algo tenga que ver...
Este pasado mes de Febrero, con un grupo de amigos sí se pudo ascender los más de 3.200 metros del Noceur. Ya no dormimos en la escuela, ahora hay una bonita Gite-Albergue regentada por un joven de la localidad. Como en aquella ocasión siempre somos la distracción para esos niños bereberes, que ante nosotros despliegan sus mejores sonrisas. Esta vez sólo vi a uno que vestía con "chilaba", la digna prenda del norte de África. Por eso,cuando Fernando me envió aquellas fotos de hace 32 años me acordé de aquellos pequeños y sus atuendos de la época, sin duda y para mi, todo un ejemplo de dignidad.
Fotos de 1985, 2011 y 2017 en Oulad Alí, Alto AtlasOriental. Marruecos.
Jerez, Septiembre 2017.
© Faustino Rodríguez Quintanilla, textos.
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